Cuento el diamante esperado
<<Dos pescadores iban al río cada mañana a buscar diamantes.
Invirtieron días y meses, y los meses se convirtieron en años, hasta que un día el río les acercó un maravilloso diamante.
–El primero de ellos, lo vio, lo tomó con cuidado y se alegró en su corazón por haberlo encontrado.
Arrojó las piedras que tenía en la mano y volvió satisfecho con el diamante esperado.
Su búsqueda terminaría, sabiéndose dueño, de un valioso tesoro.
–El otro, en cambio, vio el diamante en sus manos, se alegró en su corazón por haberlo encontrado, lo revolvió entre las piedras y siguió trabajando.
Al cabo de unas horas y ya sin el sol en su rostro, el agua turbia del río, le había arrebatado de vuelta el diamante esperado.
Ese día volvió con las piedras que tenía en la mano, y –con otras nuevas–, gracias a su trabajo.
Su búsqueda seguiría, sabiéndose esclavo, de lo que el río le dejara a su paso>>
Liliana Franco
Quiero platicar® Coaching
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