Pensar de manera repetitiva en cómo podría ser una situación determinada o bien, qué resultado podría darse sobre alguna decisión que vamos a realizar, puede generar estrés, ansiedad o preocupación por el futuro.
Vivimos en un ambiente competitivo que busca la gratificación inmediata y en ocasiones nos olvidamos de disfrutar el momento presente.
Esto también sucede con situaciones del pasado, en donde podemos sentirnos limitados por sucesos que representaron una experiencia desagradable y que en la actualidad se han vuelto un obstáculo o creencia limitante sobre nuestra forma de pensar o de ver las cosas.
Cómo es tu realidad actual?
La invitación que te hago es, a que veas tu realidad actual y a que analices de qué manera el deseo de controlar el futuro, te está afectando o impidiendo avanzar.
Igualmente, a que identifiques si es que alguna experiencia pasada te ha dejado huella y te impide disfrutar el momento presente.
Aceptando todo eso, es cuando puedes comenzar a construir una nueva forma de vida que está conectada con todas tus decisiones de cada día; como: qué comes y en qué cantidad, con quién decides pasar tu tiempo libre, cuánto tiempo le regalas a tu cuerpo para dormir y descansar, cómo cuidas tu salud, de qué forma cultivas tu mente, cómo reaccionas ante los problemas, etc.
Todo lo que hagas hoy, repercutirá en tu futuro.
De ahí a que no hay decisión pequeña, cualquier ajuste que hagas en tu presente para vivir mejor, te ayudará a elevar la calidad de tu vida futura.
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Coach personal, Liliana Franco.
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